🏗️🚦 Viaductos en Javier Prado bajo la lupa: ¿más tráfico y contaminación para Lima? 🌫️🚗
El proyecto de viaductos que impulsa la Municipalidad de Lima en la avenida Javier Prado ha encendido la alarma entre especialistas en urbanismo y transporte. La decana del Colegio de Arquitectos del Perú, Lourdes Giusti, fue clara y contundente: esta obra no solo no solucionaría la congestión vehicular, sino que podría agravar el tráfico y aumentar la contaminación respiratoria en una de las arterias más transitadas de la capital 😷⚠️.
En declaraciones a La República, Giusti cuestionó que el proyecto no esté alineado con el Plan Metropolitano de Desarrollo Urbano de Lima 2040 (Plan Met 2040) ni con el plan de movilidad urbana de la ATU, dos documentos clave elaborados precisamente para ordenar el crecimiento de la ciudad y su transporte 🚍📊. “Este tipo de infraestructuras incentivan el uso del automóvil”, advirtió, recordando experiencias pasadas donde obras similares terminaron colapsadas pocos días después de inaugurarse.
Uno de los ejemplos citados fue el viaducto del óvalo Monitor, frente a la Universidad de Lima. “El segundo día colapsó porque todo el mundo quiso usarlo. El tráfico es terrible”, señaló la decana, reforzando su argumento con la conocida paradoja de Braess 🧠📈. Este principio, demostrado científicamente desde los años 70, explica que aumentar la capacidad vial puede generar más congestión, ya que se crea una expectativa que atrae a más conductores y vehículos.
Según el plan municipal, el proyecto contempla dos grandes etapas: la primera desde el cruce de Javier Prado con Faustino Sánchez Carrión hasta el Hospital Militar, en un tramo de más de 1,4 kilómetros; y la segunda desde la intersección con Arenales hasta Las Begonias, atravesando vías clave como Arequipa, Petit Thouars y Parodi, con conexión a la Vía Expresa Luis Bedoya Reyes 🛣️🔧.
Pero las críticas no se limitan al tráfico. Giusti alertó también sobre el impacto ambiental y sanitario del proyecto. Durante la construcción se generarían micropartículas, ruido y polución, y una vez culminado, el mayor flujo vehicular incrementaría la contaminación del aire 🌫️🏥. “Es una solución muy costosa que no ataca el problema de fondo”, subrayó.
La especialista añadió un dato revelador: tres carriles como los de Javier Prado pueden soportar entre 50.000 y 70.000 vehículos, pero actualmente circulan alrededor de 40.000. Para Giusti, esto demuestra que el verdadero problema es la mala gestión del tráfico, no la falta de infraestructura 🚦❌.
Frente a ello, propuso una alternativa integral: un sistema de semáforos inteligentes que permita crear “olas verdes”, ordenar paraderos y priorizar el transporte público masivo, como el corredor rojo 🚥🚌. “Lima no necesita más cemento, necesita mejor gestión”, sentenció.
Mientras el alcalde de Lima, Renzo Reggiardo, asegura que el proyecto permitirá un tránsito más eficiente y cuenta con los permisos necesarios, el debate sigue abierto. La pregunta queda en el aire: ¿más viaductos o una ciudad pensada para las personas? 🤔🏙️
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