📉🎒 Recorte histórico en Pronabec: presupuesto aprobado no cubre ni el 10% de Beca 18
Alexandra Ames: “El Gobierno no priorizó la educación; con S/50 millones no alcanza ni para 2.000 becas de las 20.000 prometidas”
La exdirectora de Pronabec, Alexandra Ames, lanza una alerta que resuena como un campanazo en el corazón del sistema educativo: el recorte aprobado para el programa de becas es el más drástico en sus 13 años de existencia. Con S/50 millones, el Gobierno solo podría financiar menos del 10% de las 20.000 becas anunciadas para el 2026. El resto, advierte, podría quedar archivado junto con las aspiraciones de miles de jóvenes en situación de vulnerabilidad.
El contraste es duro: mientras el Congreso celebraba haber “garantizado” las becas del próximo año, la cifra aprobada no alcanza ni para 2.000 becas de la Beca 18, cuando el país registró un récord histórico de más de 103.000 inscritos.
“Esta es la reducción más grande en toda la historia de Pronabec. Antes nunca se entregaron menos de 5.000 becas”, explica Ames. Según detalla, el programa requiere S/135 millones para financiar 5.000 becas. Con S/50 millones, apenas se cubre una fracción.
Un récord de postulantes en el peor momento
Para Ames, la paradoja es evidente: nunca antes hubo tantas postulaciones, ni tan amplia difusión territorial del programa. Y justo ahora, cuando más jóvenes demostraron su talento, la oferta se encoge.
“Muchos se inscribieron pensando que serían 20.000 becas y ahora ese número se reduce a 2.000. Es un golpe para miles de jóvenes que sí quieren estudiar, pero no tienen recursos.”
Además, el programa Beca Permanencia llegó a 32.000 inscritos, duplicando el histórico, lo que demuestra —según la exdirectora— que la demanda siempre estuvo, pero faltaba una estrategia de difusión efectiva.
El “saludo a la bandera” del Minedu
El Congreso añadió una cláusula que permite al Minedu mover partidas internas para cubrir el presupuesto faltante. Pero, según Ames, esto es más simbólico que real.
“El Minedu no tiene fondos disponibles. Hoy carga con un gasto corriente fuerte por los aumentos a docentes. No hay de dónde recortar casi S/700 millones. La única salida es un crédito suplementario del MEF.”
Pero ese crédito, recuerda, recién podría llegar entre marzo y mayo, lo que podría retrasar el concurso hasta perder el año académico, dado que los exámenes de admisión universitarios son en enero y febrero.
Una tendencia de reducción
Para Ames, la decisión del Ejecutivo responde más a prioridades políticas que a negligencia. “Este Gobierno ha decidido priorizar otras cosas. No es que sea un error técnico: simplemente la educación no fue prioridad.”
Incluso, señala que voces internas del Gobierno califican a Beca 18 como un programa “caro”, lo que anticipa una posible reducción progresiva.
El debate del 50%-50% entre públicas y privadas
Sobre la propuesta de repartir equitativamente becas entre universidades públicas y privadas, Ames es contundente: no es viable.
“No hay suficientes vacantes en las universidades públicas. Además, los mejores alumnos aspiran a entrar a las de mayor prestigio, que no siempre tienen cupos.”
También aclara un mito: Beca 18 no paga la pensión más alta, pues las universidades privadas firman convenios para cobrar la tarifa más baja y, además, donan una beca por cada 25 alumnos admitidos. Solo en 2024, eso generó más de 800 becas adicionales sin costo para el Estado.
Un programa que sí genera retorno
El impacto económico del programa, afirma Ames, es sólido: un retorno social del 70%, 77% de egresados insertados en el mercado laboral y más de S/777 millones aportados al PBI solo en 2024.
“Beca 18 financia sueños, no universidades”, recalca.
¿Hay esperanza para las 20.000 becas?
“Con S/50 millones no alcanza. La única esperanza es que en 2025 el MEF priorice recursos vía crédito suplementario”, sostiene Ames. Sin ese dinero, el número de becas se mantendría reducido, afectando a miles de jóvenes que ven en el programa la llave para cambiar su futuro.